domingo, 28 de diciembre de 2014

Estudiando voy, estudiando vengo

Hace un par de semanas empecé un curso del Servef sobre eficiencia energética. La primera semana no dimos nada que no supiera ya, aunque no me vino mal recordarlo. Entonces pensé que igual no aprendía nada nuevo en el curso y que se me iba a hacer muy largo. Por otro lado eran los primeros días, así que es normal que aún no entremos en materia complicada. La segunda semana lo mismo, aunque aprendí trucos que no sabía. Eso ya es una mejora así que me animé.

Del profesor diría que explica bien, pero que pierde mucho el tiempo. Yo estoy acostumbrada a la universidad politécnica, donde nos concentran más la información y aún así somos capaces de procesarla. Ir tan relajados me pone un poco nerviosa, como si estuviéramos perdiendo el tiempo, aunque me lo intento tomar con filosofía (en el fondo no es grave).

Los compañeros de clase me parecieron pintorescos, cada uno diferente, y eso que en el fondo somos un grupo bastante homogéneo: todos somos licenciados en alguna carrera técnica. Pero digamos que enseguida nos podríamos haber puesto motes, enseguida cada uno hizo o destacó por algo concreto.
Después de conocerlos un poco más la verdad es que todos son majos y colaborativos, aunque podríamos ser objeto de un estudio sociológico igualmente jajaja.

Sólo llevamos dos semanas y sin embargo ya hemos tenido que hacer y exponer un trabajo. Yo intenté estar relajada al exponerlo, pero la verdad es que me puse nerviosa y se notó. Como haremos más trabajos espero mejorar con la práctica. Hay que aprender a controlar el nerviosismo absurdo de hablar en público.
De mi grupo de trabajo hubo un compañero que me sorprendió, presentó su parte de una forma cercana y entretenida que me gustó mucho. Habrá que aprender de él.

Del resto de grupos me resultó la información demasiado concentrada, igual porque sobre sus trabajos tenían más información que nosotros, pero esa acumulación de información restaba fluidez a la presentación. Yo soy más de “poco pero claro” que “mucho y confuso”.

jueves, 4 de diciembre de 2014

Escapa mientras puedas


M estaba perdida, en medio del campo, corriendo sin rumbo fijo, asustada porque alguien la seguía. Pese a todo el paisaje era bonito, estaba amaneciendo y en la lejanía se perfilaban los colores del amanecer, más claros en la línea del horizonte y aún oscuros a su espalda.

Corría por un camino entre campos, torciéndose de vez en cuando un tobillo al apoyar el pie en alguna irregularidad del suelo lleno de desniveles y huecos. Las hierbas del camino estaban húmedas por el rocío y M se estaba mojando los pies al pisarlas. Pero no dejó de correr, tenía miedo a que la alcanzaran.

No podía ver a sus perseguidores, pero los presentía cerca, ocultos en cada matorral. Llegó a un cruce de caminos y eligió el de la derecha. Mala elección, unos metros más allá el camino se acababa. No quiso retroceder, lo consideró demasiado arriesgado, así que siguió corriendo campo a través, pero más despacio y con mayor riesgo de torcerse un pie. Cuando se acabó la parcela no le quedó más remedio que retroceder, mirando con cien ojos a cada lado por si sus perseguidores aparecían. ¿Los habría conseguido despistar? No veía a nadie a lo lejos.

Siguió corriendo y huyendo, pero no tenía mucho fondo y al final se paró y caminó. Después de todo hacía tiempo que no veía a nadie, quizás ya no la seguían.

Un pequeño cartel le llamó la atención, indicaba un sendero hacia un pueblo vecino. Se metió por él. Nada más tomar el sendero se arrepintió, era el lugar perfecto para una emboscada. Estrecho, sin salidas por las que huir, y con poco transito de personas. Pero continuó andando y lo atravesó sin que pasará nada.

Después decidió atravesar una propiedad privada sin vallar. Era salir a campo abierto, exponerse a ser descubierta, pero se arriesgó porque al otro lado se veía un bosque espeso en el que esconderse.


Una vez en el bosque se sintió más tranquila, además el lugar era bien bonito y se dedicó a investigarlo. Había altos árboles que ensombrecían el lugar, algunos troncos caidos, guaridas de pequeños animales como liebres y multitud de cuervos en los árboles. El graznido que emitían estos últimos no tranquilizaba a M, que imaginaba los grandes y duros picos que tienen estos animales. Pero ninguno se acercó a ella, se contentaron con sobrevolar de rama en rama sobre su cabeza.

De repente oyo ruidos. Alguien se acercaba frente a ella. Un perro furioso apareció entre los árboles ladrándole y avanzando hacía ella. Se quedó quieta, mirándolo y lamentando no haber cogido ninguna de las ramas caídas que podían haber servido de apoyo para el camino y de defensa en estos casos.

El perro paró a dos metros de ella sin dejar de ladrar ni de mirarla. Ella también le miraba pero no se movía, mientras evaluaba infinidad de posibilidades de defensa en su cabeza si el animal decidía finalmente atacar.

Al poco tiempo, aunque a M le pareció una eternidad, aparecieron unos viejos cazadores que llamaron al animal. El perro no obedeció ni dejó de mirarla o ladrarle, pero se movió ligeramente hacia ellos y M avanzó para superarlo. También superó a los cazadores a los que saludó educadamente.

Los cazadores y su perro quedaron atrás y el sonido del bosque volvió. Ya no había ladridos ni conversación de personas, sólo crujido de hojas y ramas bajo sus pies y graznidos de cuervos de vez en cuando.

M se preguntaba si no andaría caminando perdida, dando vueltas en círculo, cuando vio entre los árboles que el bosque se acababa de nuevo. Salió a un campo de cultivo labrado, limpio de plantas. De nuevo quedaría expuesta a ser descubierta, pero ¿aún la seguían? 
Atravesó el campo y llegó a un pequeño pueblo. Reconoció las casas, la pequeña iglesia con su cementerio rodeándola, y la cerca del caballo de su vecino. 

Por fin estaba en casa. Se alegró y se sintió tranquila por primera vez en toda la mañana. Se regaló una ducha caliente, se envolvió en una manta acurrucándose en el sofá y se relajó.

martes, 25 de noviembre de 2014

La biblioteca del barrio

Reconozco que me daba un poco de apuro ir por primera vez, ¡qué tontería!, pero es lo que tiene hacer algo por primera vez, que no sabes cómo va a ser.

La verdad es que me ha sorprendido, creía que la biblioteca de mi barrio sería menos transitada de lo que en realidad es. ¡Está genial que vaya gente! De hecho, ¡está genial que exista! Tienes un montón de libros que puedes leer, tienes DVD con películas, tienes cursos de idiomas que también puedes sacar, tienes revistas y periódicos del día (y de otros días), tienes un montón de mesas para sentarte, y lo que yo más uso ¡tienes internet gratis! Es cierto que a veces falla, y que al principio cuesta de configurar (no detecta la red automáticamente), pero ¿no es genial tener tantos servicios de uso público?

Aunque esperaba que acudiera menos gente, el número no es tal que no tengas espacio. Yo creo que hay mucha gente que no conoce ni su existencia ni su funcionamiento, y es una pena. Pero por otro lado está bien que no se masifique y siempre haya sitio disponible.

Vamos, cultura y ocio al alcance de todos y sin agobios. ¡Qué guay! Me gusta mi ciudad :)


jueves, 20 de noviembre de 2014

Entrenando

Entrenar con un equipo, con un entrenador, con un plan de entrenamiento, con gente que comparte tu aficción está muy bien, pero tiene sus consecuencias.

Está bien seguir un plan para no dormirse y para no hacer siempre lo mismo sin progresar. Pero seguir un plan significa también esforzarse. 
El lunes fue el primer día que hicimos ejercicios de fuerza: sentadillas, triceps, biceps... 
¿La consecuencia? Al día siguiente agujetas, sobretodo en los glúteos. Aún así conseguí volver a entrenar y acabar dignamente el entrenamiento del martes. Pero el miércoles me levanté que me dolían las agujetas aún más, cada vez que me sentaba, me levantaba o cambiaba de posición en general, me dolía tanto que lo hacía despacio, pensando cada paso. Realmente me sentí muy mayor :(

De hecho me recordé a mi padre, que pobrecito tiene la cadera desgastada, le duele y no puede caminar. Él por un motivo y yo por otro, pero hacemos movimientos similares cada vez que nos levantamos o sentamos. Nos movemos despacio, nos ayudamos apoyando las manos donde podemos, y vamos diciendo "uy,ay,uy" al movernos. Muy triste.

Hoy ya empiezo a mejorar, a mí se me pasará enseguida, a mi padre no. Pobrecito, él tiene que seguir viviendo en esas condiciones. Muchos ánimos desde aquí.

En fin, que entrenar es divertido y estimulante... pero a veces tiene consecuencias negativas. A partir de ahora casi todos los lunes tendremos ejercicios de fuerza. Espero tener menos agujetas la próxima vez, espero mejorar cada semana, porque pasar 2 días sin moverse no es alternativa jejeje.


viernes, 7 de noviembre de 2014

El Miguelete y +

Le estoy cogiendo el gusto al turisteo por Valencia.

El domingo quedamos unos compañeros de departamento y subimos al Miguelete (torre emblemática de Valencia). Se supone que soy una persona en forma, bueno lo supone el resto porque yo sé que llevo como año y medio sin hacer nada de nada. Bien, subir los 207 escalones (de altura superior a la estándar actual) de un tirón se mi hizo algo duro. Llegué con el pulso y la respiración aceleradas. ¡Uf! Luego te recuperas en seguida, pero me dio la impresión de estar en muy baja forma jejeje.

Estuvimos un buen rato allí arriba observando la ciudad e intentando descifrar edificios emblemáticos. Como era día de difuntos las campanas de la torre tocaron a muerto (o eso creo yo porque era un toque algo siniestro). Y luego, estábamos tranquilamente observando la enorme campana del centro cuando - ¡dong! – se pusó a tocar las horas. ¡Qué susto nos dio la primera campanada! Realmente suena fuerte estando allí al lado :)




Finalmente bajamos y nos dirigimos al Palacio del Marqués de Dos Aguas. Un palacio con una entrada en mármol anaranjado impresionante. Fuimos a la hora prevista para la visita guiada. Está muy bien que te cuenten cosas que no podrías adivinar simplemente viendo el edificio. Nos explicaron la historia de la familia y las utilidades de cada habitación. Está muy bonito el palacio. Me recordó a Versalles (salvando las distancias), lo cual coincide con el hecho de que Versalles era la referencia a seguir en aquella época (lo mejor de lo mejor y por tanto a imitar). 
Lo que no me explicaron en Versalles (o no lo recuerdo) es que los músicos estaban escondidos en la sala de baile, o sea, que estaban en otra sala que comunicaba para que se oyera la música pero a los que no podían ver ni ser vistos. ¿Estarían igual en Versalles? ¿o sólo tocaban músicos nobles allí?

Halloween

El sol empezó a ponerse y las sombras se alargaban y empezaban a surgir por entre los oscuros rincones. M se asomó por la ventana y vio corretear a pequeños brujos, zombis y vampiros. Era su día y había que aprovecharlo.

Se puso sus mejores galas, se pintó los ojos bien oscuros, los labios bien rojos y enseñó los colmillos bien blancos. Aún se notaba sobre el cuello el mordisco que la convirtió. Silvó a sus murciélagos y unos cuantos se unieron a ella. Ya se disponía a salir de casa cuando recibió varios mensajes de su amiga de cacería nocturna: iba a llegar tarde.

“El que espera desespera” dice un refrán y M tuvo que hacer esfuerzos para no morderse sus recién pintadas uñas negras. Finalmente cogió el batmóvil y recogió en la estación a su amiga que aún iba de incógnito. Salvo la noche de Halloween las vampiresas son discretas y disimulan su condición. Pero esa noche era suya y podían campar a sus anchas.

Tenían hambre así que probaron con un coreano que encontraron por el camino, cerca de donde dejaron el batmóvil. Mi amiga opinaba que había probado coreanos mejores, quizás no era coreano de pura sangre, pero no estuvo mal del todo. Una vez probada la sangre su amiga se transformó en lo que realmente es, una vampiresa de miedo.

Acabaron la noche en H un local oscuro y tenebroso lleno de extraños espíritus, algunos aterradores como los payasos, otros no tanto como las enfermeras sexys. Había mucho zombi en el local, y todos muy orgullosos de su profesión, porque iban vestidos aún de trabajo.


Bailaron con algunas posibles víctimas para tantear cuánta sangre quedaba en sus venas, pero visto que allí no había más que zombis se cansaron y se fueron a casa a meterse en el ataúd y descansar.


miércoles, 29 de octubre de 2014

Correr es de valientes

Desde que vivo de manera nómada (un día aquí y al siguiente allá) tenía abandonado el deporte. Ya no tenía mono por practicarlo, eso se pasa el primer mes, pero sí tenía necesidad física y mental de hacerlo jajaja. Sienta bien hacer deporte, se nota.

El caso es que me hice la remolona una semana (se necesita mucho, mucho tiempo para no hacer nada) pero un lunes fui a saludar a mis compañeros de atletismo. Y claro, ya que iba a saludarles tenía que correr también. Mi idea era correr 1/2 horita, que es lo que alguna vez he hecho últimamente (incluso en Reino Unido había salido a correr los domingos por la campiña inglesa). Tampoco se puede correr mucho más de buenas a primeras.

El reencuentro estuvo bien, la gente sigue siendo muy maja, todos se sorprendieron de verme y preguntaron por mi vida. Aunque había poca gente, faltaron muchos de los "clásicos" porque el día anterior habían corrido la 1/2 maratón de Valencia y era día de descanso (o rodada suave). Ese motivo también me motivó a ir, porque sería un día suave y no moriría en el intento.

Claro que un día suave para un club de atletismo de fondo son mínimo 40 minutos de carrera. Yo pensé: hago 15 minutos, camino 5 y hago otros 15 minutos y 5 de andar y ¡ya tengo los 40! jejeje. Pero había una chica nueva, y quise probar a ver si podía correr con ella.
No íbamos muy distintas de ritmo, y de hecho corrimos los 38 minutos juntas, pero eso supuso ir un puntito menos relajada... y acabé agotada jajaja.

Yo con eso ya me daba por satisfecha, pero vino el entrenador y nos dijo de hacer técnica. Como había descansado y técnica no es mucho, pues la hice. Y luego el entrenador nos dijo de hacer progresiones de 100 m, y como tampoco parecía mucho pues también las hice. Pero mi cara debía reflejar mi cansancio cunado el entrenador me dijo que yo hiciera 4 o 6 (en lugar de 10). Sí, al final solo hice 4 y al día siguiente me dolía todo el cuerpo :D

Después de duchada volvía a casa contenta, hacía tiempo que no tenía esa sensación, la de felicidad y armonía después de liberar un poco de adrenalina. Así que decidí volver el jueves.

El jueves volví a ver a algunos compañeros de triatlón, ¡qué ilusión! Me preguntaron si me iba a volver a apuntar, pero yo les dije que de momento iba a volver a correr. Poco a poco. Aunque reconozco que me gustó que me lo sugirieran, que me quisieran en el equipo. ¡Qué majos!

Ese día corría mayormente sola, lo que quiere decir que fui realmente a mi ritmo (o sea, lenta) y aguanté más de 40' sin muchos problemas. ¡Ya me voy cogiendo! - me dije, ya que la parte mental también es importante.
Luego de nuevo técnica, esta vez con vallas lo que quiere decir que hay que levantar mucho las rodillas y se cansan mucho las piernas. Uf!
Después ducha de agua fresquita (no iba el control de Tª) que me sentó de maravilla :D

El sábado, rodada larga... ¡qué va! larga no, pero corrí 40' de carrera continua. Que después de cansarme lunes y jueves, ya está bien que consiguiera motivarme a salir. Estoy muy apegada al sofá últimamente jejeje.

Al siguiente lunes de nuevo a correr. Me junté con otra compañera de la UPV que me dijo de rodar suave conmigo para ir acompañadas, pero que me supuso correr por encima de mi ritmo. Menos mal que a los 30' nos separamos (yo quería correr 45' y ella 1h). Estaba deseando separarnos desde hacía 10'. Tuve que parar y caminar un poco antes de seguir corriendo para descansar y acabar los 45'. Es que me llevaba realmente por encima de mi ritmo. Uf!
Para acabar progresiones de 150 m. Esta vez aguanté mejor e hice 8 de las 10 que tocaban. ¡Voy progresando!

El martes, primer día de entrenar dos días seguidos :O Y además había series, uuuh. En concreto habían de 4000 m, y yo pensaba hacer 1. Pero el entrenador a un grupillo de chicas nuevas nos las cambió por series de 2000 m (3 series). Las otras entendieron 2 vueltas en lugar de 2 km así que la primera sólo hicimos 1 km, y como era corta (y la primera) me esforcé de más y la hice demasiado rápido (5'09"). Contenta por ser capaz de correr "tan rápido" en poco tiempo, pero mal, porque no fui al ritmo apropiado. El entrenador se dió cuenta de que nos habíamos equivocado (eran 4 vueltas y no 2) pero no nos hizo repetir la primera serie. Las otras 2 series (de 2 km) las hice mejor, a mi ritmo, o sea cerca de 6'/km ¡¡pero por debajo!!
Me llamó la atención que no me daba tiempo a que bajaran las pulsaciones entre series. Ya no tengo fondo :( pero estoy contenta de haber corrido por debajo de 6 :D

Esto de las series es duro, incluso si vas despacio y son cortas jajaja. Comparada con los compañeros me parecía estar parada, ellos me adelantaban a toda velocidad (en sus series de 4 km). Ya no me acordaba de las sensaciones. Agotada pero feliz :)

viernes, 24 de octubre de 2014

Bioparc

Rinocerontes, gacelas, cebras, puercoespines... ¿he vuelto a África? Pues un poquito sí, pero sin salir de Valencia. Fui a ver el Bioparc. Desde que lo inaguraron aún no lo había visitado y ya lleva muchos años en la ciudad.

23,8 euros de entrada estándar me parece carísimo, pero supongo que mantener a todos los animales será caro también. El zoo me gustó, está bien organizado y da la sensación de que estén bastante "libres".

La proyección de cómo se hizo el zoo me la perdí porque cuando abren (a las 10h) no han puesto ni siquiera los carteles de cuándo hacen las proyecciones,  y sólo hacen 2 y bastante juntas (a las 11h y a las 11h30), así que cuando leímos los horarios ya pasaban de las 11h30. No entiendo porqué no ponían los horarios a las 10h cuando acababan de abrir el parque.

Luego me dediqué a ver animalillos aquí y allá buscando los que yo ya había visto en África, pero como el continente es grande, yo estaba en un extremo y donde más se concentran es por el centro, había muchos nuevos para mí. Nuevos en el sentido de que no los ví en Sudáfrica. Me gustó mucho encontrar un montón de animales a descubrir :D De paso intenté aprenderme los nombres de diversas "cabras" y "ciervos" que ni son cabras, ni son ciervos jejeje. Bongos, blesboks, duikers, impalas, gacelas... no había kudus.

Muchos animales estaban echados a la sombra, normal yo también lo haría en sus circunstancias, pero me enteré que los leones de normal duermen 20 horas al día :O No me extraña que sólo los viéramos durmiendo.

Mi madre iba buscando un grupo de unos 3 hipopótamos que aún no habíamos visto. Yo le decía que al hipo ya lo habíamos visto en la zona de humerales. Y zas, de repente me dice: 
-mira, allí, ves como nos quedaba por ver a los hipopótamos-

Yo los miré y levanté una ceja. Resulta que como a veces confunde los nombres de las cosas se estaba refiriendo a los rinocerontes. Se lo dije y me dijo:
- Pues eso, tú ya me entiendes-

¿De verdad? Pues parece que no porque yo estaba pensando en hipopótamos jejeje.

Me gustaron especialmente los flamencos, los potamoqueros, el gorila (que me miraba mal, me enseñaba los dientes y me tiraba maderitas del suelo), las ranitas (en especial las azules, pero todas en general), el hipopótamo (porque soy muy hipo), las jirafas, las cebras y los rinocerontes (por recordarme a los de allí), los suricatas (por graciosos), el puercoespín (porque apareció uno en la obra y no lo ví al natural) y el oricteropo (por raro). Ah, y también algunos árboles, que son de mentira, pero molan igual :D

La hiena daba un poco de miedo, porque es bastante grande y la distancia que tiene que saltar para escaparse no parecía suficiente... y porque te mira con cara de "voy a saltar en cuanto te descuides".

La exhibición también me gustó. Era muy sencilla: salían los animales, cruzaban el escenario o lo sobrevolaban un par de veces y poco más. Pero la comentarísta los iba introduciendo y narrando como un cuento y quedaba muy bien. Así los veías y aprendías algunas cosas sobre ellos. Las aves en la exhibición podían volar libremente, me pregunto porqué no se van del parque aunque allí tengan la comida asegurada, o quizás sólo por eso.

Ale, aquí os dejo algunas fotos... adivinad los nombres de cada cual jejeje.

       flamencos                             potamoqueros rojos
        bongo                                   árbol de mentira 
       gorila                                         espátula    
jirafas y marabou stork                             blesbok        
        suricatas                                     avemartillos      
        gacelas                                         hiena           
rinocerontes y avestruz                      gallina africana    
                                   baobas y elefantes                        siesta de leones 

De vuelta a Valencia

Todo fue bastante precipitado. El viernes me llama mi jefe, el sábado me envía el billete y el domingo vuelo a Valencia.

Lo que más me llamó la atención al llegar fue la variedad de culturas en el metro. Había una familia de indios (o similar) con las mujeres de pelo largo trenzado y los vestidos-blusón y el pañuelo largo hacia atrás. También había un negro trajeado. Y una negra vestida de domingo, con un vestido de colores vivos y un panuelo envuelto en la cabeza también de color vivo. También subieron durante el trayecto varios asiáticos, aunque como vestían "normal" llamaban menos la atención, y turistas europeos que sabías que no eran de aquí porque hablaban en otro idioma. De hecho parecía que la gente "de toda la vida" era sólo la gente mayor. Eso me dió un poquito de pena. Me gusto la diversidad cultural de Valencia. Pero se pierde un poco el sentimiento de volver a casa.

Cuando salí del metro ya no vi tanta diversidad, pero lo que sentí es un calor pegajoso que me recordó que estaba en casa jejeje, hay cosas que no cambian.

domingo, 12 de octubre de 2014

Habemus casa

Parece ser que la zona de Inglaterra donde trabajamos está muy solicitada y no hay manera de encontrar casa para vivir. Además de que mínimo nos la alquilan 6 meses y sólo vamos a estar 3. El caso es que después de pasar algunos días en un hotel (más de 1 semana si no recuerdo mal). Al final nos han metido a 3 personas en una casita que no está mal... para 1 persona o 2 bien avenidas.

Tiene una habitación (como lo lees, 1 habitación para 3 personas), pero también tiene una cama grande en el comedor... en el comedor-cocina, y dos baños completos. En fin, aquí las fotos para que os hagáis una idea:



Está bien decorado y es acogedor, pero... algo pequeño. Por suerte nos llevamos bien entre los tres, y pasamos poco tiempo en la casa (trabajamos mucho, incluso fines de semana), así que de momento no me parece muy apropiado por parte de la empresa pero en la práctica estoy bien.

Trabajando en la campiña inglesa

Llevo algunas semana trabajando en una obra (construcción de una planta solar) cerca de Melbourn, un pueblecito cerca de Cambridge. En la campiña inglesa, vamos.

El trabajo no está mal, y los compañeros en obra son en general agradables. Únicamente la otra subcontrata en obra es un poco fría y distante, pero con ellos no necesitamos tratar mucho así que no es grave.


Somos dos ingenieros que tenemos que controlar nuestra parte de la obra. Y mi jefe estuvo semana y 1/2 con nosotros al principio, aunque iba y venía y la verdad que no nos explicó muchas cosas (o a mí me da esa expresión), más bien nos dejaba actuar sin directrices para ver lo que hacíamos... y después se quejaba de lo que hiciéramos (o esa es mi impresión jejeje).
Al principio estábamos más desorganizados, pero ahora ya empezamos a coger rutinas y a centrarnos.

Nos dieron ropa de obra, lo cual ahora me parece imprescindible, primero porque hay que ir con casco y chaleco reflectante que no tenemos porqué tener, segundo porque así llevamos el logo de la empresa por doquier, y tercero y sobretodo porque las condiciones de lluvia y frío requieren equipamiento adecuado que no tenemos porqué tener en nuestro armario particular habitual.
Me dieron (además de los polos y el pantalón del principio), un forro polar y una chaqueta doble (cortavientos/impermeable arriba y acolchado que puedes separar abajo). La chaqueta mola mucho, es super práctica para estar a la intemperie, pero no vale para la vida cotidiana por los colores jejeje.

Sí, me viene un poco grande, pero así me tapa más :D

Bodorrio

Fui al lugar de la ceremonia en autobús. Fue un poco incómodo al principio, porque no conocíamos a ningún pariente del autobús, pero al menos iba con 2 amigos más :) Se sentó junto a mí una señora mayor, tía segunda (o algo así) de la novia, pero no me dio mucha conversación.

Yo iba guapísima... por supuesto... y cuidado con decir lo contrario :P


Llegamos a la Masia de Poyo (Ribarroja del Túria) y el pasillo de entrada estaba muy bonito, con flores en capazos y velas. El sitio también tenía buena pinta, una masía antigua con un pozo en el patio central. Pero el suelo era de piedrecitas sueltas y para la fina suela de zapatos de vestir no era lo más apropiado.
Habían previsto abanicos a la entrada, pero yo como me llevé el mío propio no cogí. Efectivamente hacía calor, y los hombres se quejaban de tener que llevar camisa y chaqueta. Trás varias horas de pie sobre las piedrecitas, las mujeres nos hubiéramos cambiado gustosamente por pasar calor.

La ceremonia fue diferente. Empezaron con "en el nombre del padre..." pero luego ya no hubo más referencias religiosas. Más bien fue espiritual, con intercambio de collares de flores blancas y cosas así.

No disfruté de la ceremonia. Me dolían los pies. Eso sí, la novia estaba guapísima (el novio también pero no tanto jiji), se emocionaron, lloraron... Original como ceremonia.

Después pasamos al jardín trasero que también estaba bien decorado, con luces por los árboles y flores. Pero seguíamos en suelo de piedrecitas y yo seguía muriéndome por sentarme.

El piscolabis estaba bien y había detallitos para los invitados que me gustaron, como las chapitas y pulseras de gomas (de moda ahora). Estuve revolviendo y revolviendo entre las chapas sin saber cual elegir, había una "winter is coming" que me gustaba, y una "olvidalo, no podrías mantenerme" que también me hizo gracia pero que encontró primero otra amiga (y se la quedó). Ya iba a coger cualquiera cuando la ví y supe que era la mía:

Los aperitivos estaban buenos, y los camareros eran simpáticos, así que estábamos entretenidos. También aprovechamos para hacer fotos bajo los árboles y las velas.

Después vino la cena y ¡por fin! me senté y descansé los piecitos. La comida buena, por supuesto. Ni demasiada comida que sobrara indecentemente, ni poca que te quedaras con hambre :D Bueno y en su justa medida.



Durante la comida estuvimos preocupados por ver cuándo le dábamos nuestro regalo. El regalo del grupo de amigos que consiste en darle el dinero envuelto en un regalo original, en este caso una cesta de mimbre con la simulación de un desove de tortuga, con un tesoro escondido, con una botella a la deriva con mensajes personales... En fin, un regalo muy chulo :D

Parecía que no iba a llegar el momento de dárselo pero finalmente lo conseguimos y les gustó mucho. O esa impresión me dió. ¡Qué bien!, como me gusta que gusten los regalos que hago :)

Y ya después pues vino el baile. Y la gente iba animada. Y la música estaba bien. Pero yo no podía estar mucho de pie, no se habían recuperado los pies. Así que ya me estaba planteando ir descalza cuando un camarero nos vió (iba con una amiga) y nos ofreció bailarinas que tenía de otras bodas. Según parece hay bodas en las que ofrecen bailarinas a las invitadas para que se cambien los zapatos y las que sobran las guardan para mejor ocasión. ¡Qué super idea! ¡a mí me vinieron genial! A partir de entonces ya disfruté un poquito más, y bailé un poquito más, y pude aguantar hasta el final. Bieeeeeen.

¡Qué vivan los novios! :D


domingo, 21 de septiembre de 2014

England

De nuevo viviendo de manera nómada... ahora me mandan a trabajar a Reino Unido, a Inglaterra más concretamente.

El caso es que he estado por allí últimamente y mañana me voy a pasar unos mesecillos en la campiña inglesa.

Como coche de alquiler la semana pasada nos dieron un Hyundai ix35. ¡Qué recuerdos de cuando estaba en Bloemfontein! ¡hasta tenía el volante en el mismo lado! jejeje. Además venía con todos los extras :D


Hubo otras cosas que también me recordaron las obras de Sudáfrica, y fue que cuando llueve (cosa habitual en Inglaterra) la obra se vuelve un barrizal. El barro se te pega a las botas y los pies te pesan 3 veces más del peso que mueves jejeje.

De paso pasé unos días con mis nuevos compañeros de trabajo, a los que apenas conozco pero a los que voy a tener que ver muy a menudo los próximos meses. Casi 24h juntos, porque compartiremos coche, vivienda y trabajo. Parecen majos y espero que no acabemos como el perro y el gato.

Este último viaje tuvo muchas anecdotillas, como que me encontré a un compañero de atletismo de la UPV tanto en el vuelo de ida como en el de vuelta. ¡Qué casualidad! A ver si es una señal para que vuelva a correr, o a hacer algo más de deporte :D
También se me sentó al lado en el vuelo de vuelta un australiano de origen vietnamita que se puso a hablar conmigo para practicar su español rudimentario. ¡Qué gracioso! No hablamos mucho, pero me enteré de media vida suya jejeje.

domingo, 31 de agosto de 2014

Turisteo local

Hoy he ido a comer una paellita negra a El Palmar por iniciativa de unos amigos. Al principio no me inspiraba mucho el plan (comer paella) pero reconozco que me ha gustado y me alegro de haber ido. Está bien de vez en cuando hacer turismo por la zona. Aunque más que la paella, que estaba buena, lo que más me ha gustado es la compañía y el paseito por la Albufera.

El paseo en barca son unos 40 minutos, pero se me ha hecho más corto. No es que hayamos visto gran cosa, algunos patos y enea, pero lo de ir sentados en el borde de la barca mojándonos los pies me ha molado jejeje. El guía al principio se ha puesto reivindicativo, pero luego ya nos ha contado cosillas que nos interesaban más, aunque no oía muy bien las preguntas que le hacíamos jejeje.


 Para el que se lo pregunte, esto es la enea, la planta de la foto de la derecha con la que se hacen los asientos de ciertas sillas.

 ¿A qué me ha quedado chula la foto de la barca? Estoy hecha una artista :b

Working in Wales

El segundo día de mi nuevo trabajo me mandaron para UK, y al segundo día de llegar a Llanelli en Gales.

Allí el primer día amorticé el chuvasquero que no me quité en varios días jejeje. Y con tanto llover el campo era un barrizal, pero había moras silvestres que picoteaba cuando no me miraban jejeje. Y las ovejitas también muy graciosas. Jejeje. El segundo día dejó de llover, bieeeen.


La comida... mucha patata, pero hay algunas cosillas que están bien, como el yogur de cereza (hummm, delicious) y las cookies (mega galletas).